¿Vives interrogándote?

Bueno, gente, por fin alguien que no es de los tres iniciadores de éste despapaye se animó a escribir un texto para compartir con ustedes, así que disfruten de la probada del cerebro que nos convida Mireille:

Nada satisface al ser humano que es profundamente incapaz de gozar¨, creo que es un punto importante que debemos tomar en cuenta en nuestra vida, pues cuantos seres humanos no viven en la angustia de saber quien trajo al hombre al mundo? Dios verdaderamente existe? ¿el Islam o el cristianismo es la correcta religión? ¿cuál debo seguir?...etc. muchas preguntas que nos pueden llevar, a la perdición, y a esto no me refiero a una perdición económica, o no saber dónde estas, sino es algo más profundo, más allá que cosas superficiales, es más la perdición de uno mismo, de no gozar y buscarse uno mismo, de no llenarse uno mismo por dentro al hacer algo, de dejar de observar y solo ver, de interrogarse por todo, y dejar aun lado todo lo que está frente a ti, todo lo que puedes hacer, sin necesidad de saber de dónde vino, o apoco sabemos realmente quién fue el inventor de la computadora? Yo por lo menos no losé, y eso no impide que en haya puesto a escribir mi trabajo en una de ellas. O más aún ¿sabemos porque son los árboles que nos dan el oxígeno y no los animales? No por eso dejamos de respirar, por solo una cuestión de duda, de una respuesta tal vez que uno mismo pueda quedarse con alguna solución, pero tal vez no sea la correcta, pero aún así dejar que esto impida que disfrutes?, no lo se… pero yo creo que no sería la mejor opción, vivir interrogándote, esperando respuestas, y que tal vez nunca llegarán; y precisamente, en las religiones muchas veces pasa esto ¿cómo elegir la correcta? ¿la verdadera? Y mucha gente vive en conflicto consigo mismo, porque ya no es con el mundo, es con uno mismo, y sólo se la vive cuestionando y realizando las acciones sólo para ver si fue o no lo correcto; y si eso cambiara?

Si en vez de hacer las cosas esperando que sea lo correcto, ¿por qué no hacerlo y al hacerlo disfrutar y gozar en verdad haberlo hecho y si fue algún error haberlo realizado no volver a caer en ello?...só

lo así se aprende y no sólo se aprende, sino se comprende, y se siento uno mismo bien por haberlo hecho aunque haya sido un error? Si tal vez fue un error grande peor si no lo hubieras hecho te quedarías con la duda de que pasaría, y caes en esto que yo llamo la perdición, es como vivir preocupado de buscar lo que es verdadero, pero perdiéndose en sí de todo lo que podría llevarte a lo verdadero.

Explico esto. Yo no se si seguir la religión del catolicismo, porque no me gusta la idea de que le tenga que decir al padre mis pecados y confesarme, y por esto dejo de vivir el catolicismo, o simplemente no me confieso, pero que tal si el decirle al padre errores que has cometido te ayuda a liberarlos (de cierta forma) y te sientes con un peso menos contigo mismo y eso ayuda a que sigas gozando de hacer las cosas ?, bueno esto son solo ejemplos, pero así lo podemos aplicar en muchas cuestiones distintas en la vida. Espero hacerme entender, pues mi punto es que tal vez la religión que ere son sea la correcta, que tal vez el que nos haya tocado ser hombre o mujer, es por alguna razón y aprendes cosas que no aprenderías siendo el sexo opuesto? Por esto para que vivir con interrogaciones, con quejas, ¿por qué a mi?, ¿por qué soy hombre y no mujer? ¿por qué por más que rezo Dios no me escucha? Es precisamente por esto… porque vives preocupado de ello, porque en vez de ver lo que esta a tu alrededor y gozar solo lo estás cuestionando.

Acepto que hasta a mi me cuesta trabajo aplicar la filosofía que digo, vivir sin interrogantes, o en vez de quejarte gozarlo y verle el lado positivo y sacarle provecho, aunque no estoy pidiendo, o diciendo que nunca lo hagamos, pero no dejar que vivamos con la interrogante de qué es el hombre? Y esperar respuesta, cuando uno mismo se puede crear su respuesta, siendo hombre, si, y no me refiero a el sexo masculino o femenino, sino que SIENDO hombre, vivir, observar más no ver, sentir, valorar, caer y volverse a levantar… tantas cosas que pueden llevarte a ser alguien y llenarte como ese alguien. Y esta bien de vez en cuando preguntarnos que es el hombre? Pero solo si va dirigido al camino de ¿quién soy yo? ¿lo que hago me llena? ¿soy quien verdaderamente quiero ser, o solo estoy siguiendo alguna moda? Sí, interrogantes que te ayuden a profundizar en ti, en lo que haces, para vivir simplemente feliz, pero con el verdadero sentimiento de felicidad, el que te llena, el que a pesar de que vivas en una injusticia vivas esa injusticia lo mejor posible y sacándole provecho, aprendiendo de ella, sin resignarse a hacerlo.